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Sin darnos apenas cuenta, dentro de pocos días estaremos a las puertas de las clásicas y tradicionales fiestas de Navidad y Año Nuevo, un tiempo de alegría, regocijo saludos y regalos Calles plazas, tiendas y grandes espacios comerciales, se disponen a adornar con sus mejores galas, luminarias de colores, carteles publicitarios y toda la parafernalia de artilugios para que un año más, la ciudadanía, aunque mermada en su economía familiar pueda disfrutar de estos días de fiesta, - el que pueda - de unos días de asueto en compañía de familiares y amigos. Por otro lado también, como no, Ayuntamientos, y demás corporaciones y entidades ciudadanas movilizan sus recursos económicos con el fin de colaborar con estos tradicionales festejos navideños.
Pero no muchas personas tendrán la oportunidad de poner en sus mesas un toque distinto al habitual de otros años, escogiendo sus platos preferidos como el delicioso marisco, para empezar, la langosta, la lubina, el besugo o el asado de carnes. En esta ocasión serán escasos los más acomodados en sentarse ante la mesa dispuesta para los poderosos capitalistas defraudadores de guante blanco donde no les faltarán, sin duda alguna, aún estando encarcelados, de los más delicados y caros manjares, de la degustación de los deliciosos cavas y de los mejores y olorosos vinos que serán consumidos con alegría sin tener en cuenta o no querer saber que la pobreza que se cierne sobre todo el planeta, como lo demuestran las interminables, terribles y sangrientas guerras fraticidas, el hambre, la sed la falta de justicia y demás calamidades todo ello por la falta de ese amor tan necesario entre la humanidad que nos recomendó encarecidamente cuando estuvo en la tierra nuestro dechado Jesús.
No obstante, aparte de esta consideración tan desagradable, es evidente que para los que tienen aún la fortuna, de seguir trabajando, con redoble de tambores, y percibir la paga extraordinaria, si es que la llegan a obtener tendrán la oportunidad y la grata alegría de verse con sus familiares juntos reunidos alrededor de la mesa, y por aquello de la oferta y la demanda, degustando la clásica sopa de “galets” seguida tal vez de un muslo de pollo con ciruelas o unos macarrones a la cazuela o tal vez unas lentejas con bacalao acompañado de algún que otro vino peleón. Y por supuesto, como no, también habrá intercambio de regalos de confraternidad y abrazos entre familiares y amigos.
Pero aquí no se acaba todo, porque también en el transcurso de la llamada Noche Buena , Navidad, Fin de Año y Reyes los mermados bolsillos de los “currantes ” debido a loa gastos de las incursiones a salas de fiestas conciertos, y en especial los regalos de Reyes y otras diversiones, se habrán agotado. No cabe duda que estas fiestas serán recordadas como una de las más austeras que se recuerdan
Para finalizar debemos aclarar que los testigos cristianos de Jehová no celebran las festividades religiosas cono la Navidad , la Pascua Florida , o nacionales, así como tampoco Halloween y Año Nuevo porque tienen origen pagano o por que implican lo que ellos consideran idolatría a símbolos no bíblicos. Tampoco celebran los cumpleaños. No hay prueba de que los cristianos o adoradores de Dios lo celebraran. Además, otro argumento es que Jesús, la persona más importante que ha vivido en la tierra, nunca celebró su cumpleaños ni tampoco sus discípulos, pues no hay registro de ello en la Biblia , pero si mencionó especialmente que recordasen su muerte (Eclesiastés 7:1; Lucas 22:19) -
Nicanor Molina.
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