La carta del apóstol Pablo da inicio con los clásicos saludos a la congregación de Ëfeso bendiciendo la excelsa gloria de Dios por su bondad inmerecida y por haberlos escogido Jehová Dios para permanecer unidos por medio del cual tienen la liberación por recate mediante la sangre de Jesucristo.
La carta de Pablo, continua expresando que Jehová ha llevado a cabo que su amor sea abundante hacia ellos, haciéndoles conocer el Secreto Sagrado de su voluntad que es la de reunir todas las cosas de nuevo en Cristo, en unión con quien también fueron escogidos como herederos, como prenda por anticipado.
Pablo ora para que estén firmemente convencidos de la esperanza a la cual han sido llamados y que comprendan que Dios usará hacia ellos el mismo poder que usó para resucitar a Cristo y colocarlos muy por encima de todo gobierno y autoridad y hacerlos cabeza sobre todas las cosas para la congregación. (Efesios 1: 1 al 12)
Una vez leído este magistral acontecimiento, podemos concluir que cuando deseamos escoger cualquier cosa para nuestro particular provecho como por ejemplo un objeto,, un cuadro o simplemente una fruta a bien seguro que escogeríamos lo mejor, es decir lo que resalte sobre lo demás, o que cuando redactamos algún escrito, ¿verdad que lo primero que hacemos es un borrador y luego escogemos lo mejor de lo que hemos escrito? Pues bien, así debemos hacer el transcurso de nuestra vida: escoger lo mejor y desechar lo que no agrada a Jehová para ser aprobados por él en su prometido venidero paraíso aquí en la tierra..- Nicanor Molina.
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